lunes, 20 de octubre de 2008

DOS SEMANAS FUERA

¿SON INFLUYENTES LOS LECTORES DE BLOGS?

Por JUAN FREIRE (SOITU.ES)

Existe una percepción generalizada entre buena parte de los internautas y especialmente entre aquellos más activos en los medios sociales de que ellos son más influyentes que el resto de la población sobre las opiniones y decisiones de otros, utilicen o no internet. Una segunda percepción tiende a asumir que la información y opiniones que se difunden en los medios digitales, y en particular en los blogs, tienen una influencia elevada sobre la audiencia, mayor que la de los medios convencionales (prensa, radio o televisión). ¿Qué existe de cierto en estas dos percepciones?

Hace un tiempo aportaba los resultados de una serie de experimentos y modelos que ponían en duda que los considerados influyentes lo fuesen realmente en el márketing viral, por lo que las estrategias de márketing deberían orientarse más a una difusión amplia de los mensajesque focalizarse en unos pocos nodos considerados influyentesUna reciente encuesta realizada en España a lectores de blogs aporta información complementaria de interés.

La iniciativa ha nacido de Weblogs SL, la principal empresa dedicada al desarrollo de blogs temáticos comerciales en España, para tratar de aportar datos objetivos que apoyen su apuesta ante marcas y empresas por los blogs como vehículos de comunicación y márketing. El estudio ha sido promovido en concreto por Social Media, fundada por el antiguo equipo comercial de Weblogs SL y dedicada a gestionar la publicidad de algunos de los blogs más populares en España.

Esta empresa encargó al instituto de investigación de mercado GFK un estudio sobre "blogs, influencia y publicidad" [1] realizado mediante una encuesta 'online' a 920 lectores de blogs mayores de 15 años que los autores consideran representativos de la población de internautas españoles. Es discutible su representatividad, dado que se seleccionaron por haber leído blogs en el último trimestre (no todos los internautas leen blogs) y aproximadamente un tercio se eligieron por haber leído blogs de Weblogs SL. Aún así, dada la popularidad de los blogs de esta empresa, posiblemente los resultados no estén demasiado afectados por esta premisa.

Para la difusión de los principales resultados del estudio puede consultarse una presentación disponible aquí (pdf) o en Slideshare:

domingo, 19 de octubre de 2008

10 RAZONES DEL FRACASO DE LA PRENSA ESCRITA



Tomado de Mangas Verdes 

Muy, pero que muy interesante el artículo ‘10 reasons why newspapers won’t reinvent news‘ de Xark!, en el que se exponen 10 razones por las que nadie puede esperar que sea el periodismo tradicional el que reinvente el modelo de comunicación y lidere la oferta de información en la web.

Pensaba hacer alguna puntualización, pero a medida que iba leyendo he ido confirmando mi identificación con cada uno de los puntos. Así que he decidido traducir libremente el artículo, intentando respetar al máximo los titulares de cada punto y aportar lo que me ha parecido conveniente en los desarrollos. Un artículo que debería figurar enmarcado en los despachos y las redacciones de toda empresa periodística tradicional (que pretenda sobrevivir).

  1. La audiencia principal de los periódicos aún no demanda el cambio: el grueso de los consumidores de medios de papel se sitúan en una franja de edad en la que Internet no tiene especial protagonismo. Sin embargo, esa franja ha ido envejeciendo con el tiempo y lo hará aún más en los próximos años. Las nuevas generaciones, ésas que estarían llamadas a convertirse en sucesores, son francamente partidarias de la web.
  2. El modelo empresarial de la prensa es una reliquia de la era del monopolio de la información: la escasa visión de futuro y el culto a la rentabilidad inmediata provocan que las empresas periodísticas no elaboren estrategias de inversión o reinversión a medio y largo plazo. “Internet no provoca beneficios y, por tanto, no vamos a invertir más allá de lo indispensable en ella”.
  3. Las redacciones tradicionales están ancladas en una idea fatal: todo lo nuevo es peligroso. No descubrimos nada nuevo si decimos que las redacciones tradicionales miran con desconfianza, cuando no con abierta agresividad, todo lo que se mueve en Internet, especialmente lo que tiene que ver con la comunicación. Muchos de los responsables de esas redacciones, lejos de fomentar el cambio y el acercamiento, el reciclaje, mantienen una actitud de soberbia: rechazan cualquier cambio que no cuente con su consentimiento.
  4. No hay investigación ni planes de reciclaje, no ven lo que se les viene encima, no cuentan con las herramientas necesarias para sobrevivir ni sabrán utilizarlas cuando las adquieran.

    Ejercicio práctico para directores de periódicos: reúna a todo su staff, reparta papel y bolígrafo e invíteles a escribir una etiqueta o enlace de hipertexto sobre la noticia en la que estaban trabajando. Si muchos son incapaces, usted tiene un problema. Si ninguno puede, está usted ante una grave crisis”.

    Lo cual no es sino el resultado de la ausencia de políticas de desarrollo de personal y de los despidos no justificados con la excusa del recorte presupuestario.

  5. Los periódicos carecen de personal tecnológico y creativo cualificado: no abundan los programadores, diseñadores web, gestores de bases de datos, artistas del mashup, codificadores de XHTML/CSS, redactores multimedia, animadores expertos en Flash, comunicadores gráficos, infógrafos 2.0… En lugar de eso, las nóminas se hinchan con pluses y sueldos de dinosaurios resentidos que aún se pelean con sus cuentas de correo electrónico.
  6. La inercia, la incertidumbre y la parálisis presiden la mayoría de las empresas periodísticas tradicionales. Incluso aunque las empresas tengan en la recámara cuadros inteligentes y preparados para tomar el testigo de la dirección en el futuro, éstos no podrán hacer nada frente a una competencia, los medios nativos digitales, que les llevan una ventaja insalvable. Pero es aún peor cuando los auténticos innovadores son expulsados o marginados ante el pánico que provocan las crisis y los cambios.
  7. Los anuncios por palabras dan más dinero que los banners: es la excusa reina entre los gerentes de empresas tradicionales. Y, aunque te cueste creerlo, es totalmente cierto. Hasta que Internet no se configure como el principal canal comercial del mercado publicitario, las cosas seguirán así. ¿Pero es eso un argumento que deba tomar en consideración el responsable de una empresa que pretenda remontar el presente y triunfar en un futuro a medio plazo? Es la diferencia entre el cortoplacismo suicida y las estrategias comerciales a largo plazo.
  8. La prensa ha perdido ya uno de sus factores de venta fundamentales: la ‘moneda social’. Lo podemos llamar también ‘conversación’. En 2008, todo el discurso político relevante ha tenido lugar en la Red. Periódicos y televisiones no han sido más que una sombra pálida de cuanto acontence en Internet. Y el espectáculo no ha hecho más que comenzar.
  9. La conexión entre calidad y rentabilidad se ha roto definitivamente: se ha advertido por activa y por pasiva. Lo hemos hecho los profesionales inquietos, lo han hecho los bloggers interesados en la materia y lo ha hecho la ciudadanía a través de todos los medios que ha podido: la calidad de la información periodística está por los suelos. La obsesión por el beneficio a corto plazo recortando la calidad es obviamente una estrategia para el fracaso, y la oleada reciente de despidos de profesionales contrastados sólo ha acelerado el proceso. Los periodistas admiten esto en privado, pero el problema es que el público ya lo sabe.
  10. Las empresas periodísticas odian el periodismo… moderno: las empresas periodísticas no sobrevivirán a la revolución de la comunicación si la gente que las integra continúa oponiéndose a las reglas, a las convenciones y a la cultura misma de esa revolución. Usted jamás reciclará con éxito su empresa si continúa castigando a los innovadores, matando a los mensajeros, recompensando a los medradores políticos y mascullando en la barra del bar que la culpa de todas sus desgracias la tiene… el futuro.